Camila entendió rápidamente desde su primer día de trabajo, que el sótano, ese lugar donde es común encontrar los departamentos de ingeniería clínica, era un lugar aislado, donde no podría ser visible y su impacto sería diezmado.
Así que decidió cada día acercarse uno a uno a los servicios a conocer sus procesos, comenzando por el departamento de imágenes diagnósticas aprovechando una sutil y clara oportunidad: el director del área acostumbra ir por café a la misma hora que ella. – ¿Hola Doctor Juan, qué tal un café? – Claro ingeniera!, tengo 10 minutos.
Luego de saludar y preguntar como iniciaba su día, comenzó poco a poco a conocer algunas anécdotas y tubo espacio para preguntarle rápidamente acerca de las tecnologías biomédicas con las que contaba en servicio y el estado de su infraestructura.
El doctor Juan le cuenta que hace poco había tenido un familiar cercano enfermo y requería de una ecografía; sin embargo, tuvo que esperar 45 días para realizar la prueba. – “Nuestro servicio tiene alta demanda y la oportunidad de ofrecerlo pronto es cada vez menor, no pude hacer mucho por mi familia en este caso”.
Camila desde su empatía comenzó a analizar la situación y como buena ingeniera a convertir la información del doctor en posibles soluciones. “Doc, tener 45 días significa que al final de cada mes (30 días en promedio), la capacidad de atención se encuentra ocupada al 100%, esto además de tener un impacto en la atención de los pacientes, significa que el servicio está perdiendo la oportunidad de generar más valor durante los 15 días de retraso que restan antes de los 45 días que en promedio deben esperar para sus citas.
Durante el café compartieron datos aproximados del número de pacientes atendidos al mes, costos de cada procedimiento, recursos humanos necesarios. Camila por su parte le explico los costos de un nuevo equipo, formas de pago, tiempos de instalación y de garantía. Fue un café muy productivo.
Cómo era de esperarse, con el apoyo del doctor en la junta, los datos de oportunidad, costos e ingresos esperados de su proyecto su presupuesto no solo fue aprobado, sino que fue el inicio del proyecto de ampliación de todo el servicio de imagenología.
El poder de un café y la empatía para mejorar la atención de las personas, de nuestras familias.