El impacto de la tecnología en los sistemas de salud es directo y tangible. Todos sabemos que está involucrada 24 horas al día, 7 días a la semana, 365 días al año en todos los procesos básicos de la atención en salud: prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de enfermedades.
Entender esta idea, nos brinda un argumento de peso en relación a la relevancia de la ingeniería clínica y su impacto directo en los objetivos mundiales de desarrollo relacionados con la salud.
Uno de los objetivos estratégicos de la Organización Mundial de la Salud es ” asegurar la mejora del acceso, la calidad y el uso de productos médicos y tecnologías sanitarias”. En consistencia a lo anterior y en representación de sus 191 estados miembros, la OMS adoptó desde Mayo del 2007 la resolución WHA60.29, que habla entre otras cosas, sobre la necesidad de establecer como prioridad la selección y gestión de tecnologías sanitarias.
Lo anterior sirvió de base para establecimiento de la iniciativa mundial sobre las tecnologías sanitarias (GIHT), que busca hacer que las tecnologías sanitarias más indispensables estén disponibles siempre a precios asequibles, principalmente para poblaciones de bajos recursos.
La OMS y ha dedicado capítulo completo sobre gestión de dispositivos médicos y tecnologías sanitarias, puedes descargarlo a continuación en el siguiente enlace directo
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